En Villa Belmiro, estadio del Santos de Brasil, Pelé decretó su primer gol en la ambicionada Copa de Campeones de América (Libertadores desde 1965). Marcó dos precisamente en el categórico 9-1 que los paulistas endosaron al Cerro Porteño paraguayo. Ese juego forjó un idilio del Santos y del Rey con la máxima competición continental de clubes.